
25/04/2025
Pimec inicia con Carles Puigdemont una ronda de contactos políticos para trasladar la inviabilidad de la actual propuesta de reducción de jornada, exponiendo los aspectos más críticos para las pymes
Antoni Cañete considera que la medida es inasumible para las pymes en los términos actuales, especialmente en un contexto económico agravado por la guerra arancelaria
Barcelona, 25 de abril del 2025. El presidente de Pimec, Antoni Cañete, ha iniciado hoy una ronda de reuniones con líderes políticos para manifestar la postura crítica del tejido de pequeñas y medianas empresas a la actual propuesta de reducción de la jornada laboral impulsada por el Gobierno español.
El primer encuentro ha tenido lugar en Waterloo con el presidente de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont. Durante la reunión, Antoni Cañete le ha trasladado la profunda preocupación de las pymes ante la actual propuesta de reducción de jornada, que ha calificado de “desconectada de la realidad empresarial y de las necesidades de nuestro país, con déficits claros en el mercado de trabajo”. Según el presidente de Pimec, la medida supondría “un incremento insostenible de los costes, especialmente para las microempresas y los sectores más afectados”.
En este sentido, Cañete advierte que la entrada en vigor inmediata de la reducción de jornada, sin el aval de la negociación colectiva y sin tener en cuenta la dimensión empresarial, genera sobrecostes evidentes e inasumibles para las empresas de menor dimensión. También considera desproporcionado el incremento de las sanciones vinculadas al registro horario, así como las obligaciones relativas a la desconexión digital. A todo ello, se añade la carencia de mecanismos de flexibilidad en la gestión de la jornada, como por ejemplo la distribución irregular o las horas extraordinarias, hecho que convierte la medida en un contrasentido.
El presidente de Pimec ha añadido que esta medida, así como su proceso de negociación, evidencian un “fracaso del diálogo social estatal” y ha reclamado que la cuestión se trate de manera global, abordando acciones orientadas a la mejora del trabajo, la competitividad empresarial y, como consecuencia, el tiempo de trabajo. Para conseguirlo, “es necesario impulsar medidas para reducir el absentismo laboral, mejorar la productividad y fomentar la formación y la capacitación profesional”.
Finalmente, el presidente de Pimec ha querido incidir en el hecho que “todo esto se produce en un contexto económico marcado por una elevada incertidumbre y tensión internacional, con una guerra arancelaria abierta que puede afectar gravemente la competitividad de las empresas y distorsiona las cadenas de suministro, agravando todavía más la situación de las pymes”.
Pimec continuará próximamente la ronda de encuentros con los principales partidos políticos con representación en el Congreso para articular un frente común contra una propuesta que considera que no mejora la economía productiva.