-El burnout, agotamiento físico y mental crónico, que va más allá del estrés, es una enfermedad clasificada por la CIE que requiere de atención psicosocial y formación para poder gestionarla-El objeto de la Fundació PIMEC es profundizar en el análisis del burnout que sufre la persona empresaria y minimizar sus efectos adversos sobre la evolución de los negocios -El líder empresarial que padece burnout pone en peligro la viabilidad de la empresa, ya que afecta a la calidad en la toma de decisiones -El empresario y la empresaria no pueden parar, toman decisiones y riesgos continuamente y se llevan el burnout a casaBarcelona, 31 de març del 2023. El CaixaForum Macaya ha acogido más de ochenta personas que han asistido a la primera Jornada Pyme y Salud: burnout del empresario y de la empresaria, que ha organizado la Fundació PIMEC. El objetivo del acto ha sido divulgar como este síndrome psicológico, que nace de la tensión crónica producto de la interacción conflictiva entre la persona y su trabajo, afecta a la toma de decisiones empresariales. De hecho, el entorno actual de complejidad e incertidumbre, inclusive incomprensible en algunos casos, conlleva estados difícilmente gestionables, que pueden llegar a afectar a la calidad del proceso de decisión, la marcha de la micro o pequeña empresa y la vida personal y familiar.La jornada ha comenzado contando con Josep González, presidente de la Fundació PIMEC, que ha iniciado su intervención mencionando que al burnout se le conoce también, coloquialmente, como el síndrome del trabajador quemado y de aquí ha hecho una derivada a la persona empresaria quemada. De hecho, ha enfatizado que el objeto de la Fundació PIMEC es profundizar en el análisis del burnout que sufre el empresario y la empresaria, minimizando sus efectos adversos sobre la evolución de los negocios.A continuación, el presidente de PIMEC, Antoni Cañete, ha subrayado que la Fundació PIMEC es el corazón de PIMEC y un elemento esencial, necesario y multiplicador de nuestra estrategia de acción empresarial. “Se ha de poner en valor la dimensión social del empresariado”, ha destacado, añadiendo que “la persona empresaria que sufre burnout pone en peligro el negocio, por consiguiente, este síndrome psicológico coge una dimensión muy grande”.El testigo lo ha cogido Mercè Salvat, secretaria general del Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya, quien ha explicado que cualquier problema de salud tiene efectos multifactoriales y que el burnout afecta a las empresas, trabajadores y a la sociedad en general. Ha añadido que las empresas de Catalunya, que en un 94% tienen entre 0 y 9 trabajadores, han sufrido muchas crisis continuadas que han impactado en su toma de decisiones. Ha anunciado que, desde el Departamento de Salud, están desarrollando propuestas con el objetivo de cuidar de la salud mental.Después ha correspondido el turno a Marina Romeo, doctora y profesora titular de la Facultad de Psicología de la Universidad de Barcelona, quien ha definido el burnout como un agotamiento físico y mental crónico, que va más allá del estrés. Romeo ha mencionado tres síntomas del burnout: el primero, el agotamiento emocional, donde la persona “no puede con su alma”; el segundo, la despersonalización, donde el sujeto deja de ver al otro como un individuo; y el tercero, el sentimiento de baja utilización personal, donde reside la sensación de ser poco útil. La doctora Romeo ha finalizado su intervención apostillando que la pandemia ha sido el gran detonador del burnout y que éste tiene una categoría propia, siendo diferente del estrés, la angustia y la depresión. En particular, se vive un desequilibrio entre lo que el sujeto aporta y lo que recibe, pero que hay tratamientos individuales y grupales para revertirlo y la clave es la previsión.Marina Romeo se ha incorporado a la mesa redonda “¿Qué es el burnout? La pandemia del siglo XXI” con Francesc Martí, jefe de servicio de PRL para pymes y autónomos de MC Mutual, y Joan Piñol, director general de la Fundación Salud y Persona. Martí ha subrayado que durante y después de la pandemia se ha registrado un incremento del 30% en patologías relacionadas con la salud mental, que en muchas ocasiones se traduce en bajas laborales, donde las mujeres computan un número superior respecto a los hombres. Por su parte, Piñol ha destacado que el burnout es una enfermedad clasificada por la CIE y que requiere de atención psicosocial y formación para saber gestionarla. “Es muy importante saber decir que no y tener claro que trabajar más horas no significa trabajar mejor”, ha enfatizado.A continuación, Carla Martí, responsable de Formación Continua de Empresa en UManresa UVic-UCC, ha realizado una encuesta online entre los asistentes a la Jornada y ha concluido que hay un agotamiento mental entre ellos, por lo tanto, parece que el burnout “ha llamado a la puerta de sus vidas”. Motivo por el cual ha propuesto que cada cual pare y haga una reflexión sobre su actividad diaria.Después, ha tenido lugar la mesa redonda “Estrés anticipatorio: variables del entorno que afectan a la persona empresaria”. En esta, Carole Mª Conforti, presidenta de Kosma Global Observatory Environmental Health, ha remarcado que estamos envueltos de factores que influyen en nuestra salud que son tóxicos como, por ejemplo, la calidad del aire. Factores tóxicos que afectan a la salud de las personas empresarias y trabajadoras. Por su parte, el doctor Ander Chamarro, decano de Psicología de la UAB, ha propuesto hacer marcha atrás en la interacción con las redes sociales, ya que el uso excesivo contribuye al burnout. Ha planteado hacer una planificación razonable de la tecnología para buscar espacios de desconexión, inclusive, si hace falta, como hacen en otros países, se podría legislar sobre esta materia. Después, el doctor Felip Miralles, director de Tecnologías de la Salud – Eurecat, ha hablado de 5 situaciones vinculadas a la tecnología y que también pueden comportar burnout; el tecno-estrés que es una sobrecarga de mensajes en las redes sociales, la tecno-invasión donde el individuo pierde las fronteras entre la vida laboral y personal, la tecno-dificultad que consiste en la actualización continuada en nuevas tecnologías, la tecno-incertidumbre donde mantenerse al día de los avances es inasumible y la tecno-inseguridad que induce a pensar que la tecnología nos quitará el trabajo. Finalmente, el doctor Benedikt Amann, coordinador de las Unidades de Psiquiatría y director de la Unidad de Investigación Centre Fòrum, Parc de Salut Mar, IMIM y profesor asociado de la UPF en Barcelona, ha subrayado que al Hospital les llegan personas con enfermedades somáticas y depresión que han sido generadas por burnout. Ha referenciado un estudio del Clínic donde se identifica que 1 de cada 5 personas desarrollan una depresión por motivo del trabajo. Además, ha explicado que están participando en el proyecto europeo MENTUPP, que tiene por objetivo mejorar el estrés de los empresarios y los trabajadores de las pequeñas y medianas empresas y con el que conseguirán disponer de una evidencia científica de la existencia de enfermedades mentales dentro del ámbito empresarial. Ha mencionado que en nuestro país estamos tan quemados como en otros estados europeos, que el estrés es bastante equilibrado ya que las crisis como la del Covid-19 o la guerra de Ucrania afectan de igual manera a los diferentes territorios. Ha finalizado comentando que, desgraciadamente, en su opinión, las empresas no reconocen el problema del estrés y que la ansiedad y la depresión pueden ser letales.A continuación, ha sido el turno de Beatriz Fagundo, doctora en Neurociencia Cognitiva y fundadora y directora del Centro de Estimulación Cerebral Barcelona, quien ha explicado la base neuronal de las emociones y del proceso de decisión, relatando que con un electroencefalograma podemos conocer la actividad del cerebro cuando hace cosas. Ha añadido que el estrés lo que provoca es el colapso del cerebro y así la toma de decisiones de la persona empresaria queda afectada, ya que la parte prefrontal trabaja menos y disminuye la capacidad de planificar. Para acabar, Fagundo ha remarcado que la parte prefrontal del cerebro es el “director de orquesta”, es la más nueva y la más importante de todas.Siguiendo con la toma de decisiones, Marc Bernardich, doctor en Creación y Gestión de Empresas de la UManresa-FUB y director de los estudios de Empresa UManresa UVic-UCC, ha expuesto cómo afecta el burnout al empresario fruto de la sobre estimulación diaria. La persona empresaria no puede parar, toma decisiones y riesgos continuamente y, además, se lleva el burnout a casa. Bernardich ha alertado que una decisión tomada en condiciones desfavorables puede llevar al cierre de la empresa, que la relación entre capital, trabajo y actitud queda afectada con el burnout y que el empresario ha de aprender a no “burnoutear” a los demás -trabajadores, familia y personas de su entorno-. Después, la doctora Silvia Cubo, profesora en UManresa UVic-UCC, ha realizado una dinámica de grupo entre los empresarios y empresarias alrededor del burnout.A continuación, Laura Cardona, licenciada en Psicología Clínica por la UAB, máster en Psicopatología Clínica y en Psicoterapia en la URL y voluntaria de la Fundació PIMEC, ha tratado la contención emocional para un buen proceso de decisión, relacionando 5 puntos para tomar buenas decisiones: el primero, conocer bien el problema, no se pueden tomar buenas decisiones desde el rechazo o la vanidad o el impulso; el segundo, hacer una mapa mental de las posibles acciones y revisarlo; el tercero, compartir conocimiento con la gente que nos quiere para concretar las acciones; el cuarto, planificar la toma de decisiones y saber que ésta comporta riesgos; y el quinto, considerar que hay la posibilidad de fracasar y que quizás tendremos que rectificar.La clausura de la Jornada ha contado con tres intervenciones. Gemma Tarafa, regidora de Salud, Envejecimiento y Curas del Ayuntamiento de Barcelona, que ha destacado que el trabajo es un tema clave para abordar desde la vertiente de la salud y ha puesto como ejemplo que las personas paradas durante dos o tres años tienen 3 veces más probabilidades de desarrollar un problema de salud mental. Por su lado, Oscar Riu, director general de Relaciones Laborales, Trabajo Autónomo, Seguridad y Salud Laboral del Departamento de Empresa y Trabajo, ha subrayado que todos estamos afrontando nuevos retos y los empresarios se han de adaptar a los cambios. La salud mental de la persona que ha de decidir hacia donde ha de ir la empresa es más que importante, es crítica. Y finalmente, Josep González, presidente de la Fundació PIMEC y presidente de Honor de PIMEC, ha agradecido la asistencia, la participación de expertos y autoridades y a los patrocinadores que han hecho posible este evento dedicado al burnout que sufre el empresario y la empresaria.